El número uno del mundo, Novak Djokovic, respondió el miércoles a las críticas a su carta al jefe del Abierto de Australia, Craig Tiley, en la que sugería aliviar las restricciones de cuarentena, diciendo que sus buenas intenciones fueron “mal interpretadas”.

Hasta 72 jugadores están confinados en sus habitaciones de hotel durante 14 días y no pueden entrenar para el Abierto de Australia del 8 al 21 de febrero después de que los pasajeros de tres vuelos chárter que los llevan a Melbourne dieron positivo por el nuevo coronavirus.

Según los informes, Djokovic pidió que se redujeran los períodos de aislamiento y que los jugadores en cuarentena estricta se trasladaran a “casas privadas con canchas de tenis”, lo que provocó la reacción de los australianos.

Tiley confirmó que eran sugerencias y no demandas.

“Mis buenas intenciones para mis compañeros competidores en Melbourne han sido malinterpretadas como egoístas, difíciles e ingratas”, dijo el serbio, que se está aislando en Adelaida junto con otros jugadores importantes, en un extenso comunicado.

“Esto no podría estar más lejos de la verdad.

“… a veces, cuando veo las consecuencias de las cosas, tiendo a preguntarme si debería sentarme y disfrutar de mis beneficios en lugar de prestar atención a las luchas de otras personas”.

El entrenador de tenis, Daniel Vallverdu, dijo a Reuters que los jugadores en cuarentena estricta deberían recibir un trato preferencial de parte de los organizadores, como los horarios principales de práctica y los partidos programados en las horas más frescas del día.

Djokovic, quien el año pasado renunció como jefe del Consejo de Jugadores de la ATP para lanzar un cuerpo de jugadores separatistas, ganó un octavo título récord del Abierto de Australia en Melbourne en 2020.

El ex jugador australiano de la Copa Davis Sam Groth acusó la carta de Djokovic como un “movimiento político egoísta”, mientras que Nick Kyrgios llamó al serbio una “herramienta”.

Djokovic dijo que se preocupaba “genuinamente” por los demás jugadores.

“Me he ganado mis privilegios por las malas … es muy difícil para mí ser un mero espectador sabiendo lo mucho que me importaba cada ayuda, gesto y buena palabra cuando era pequeño e insignificante en el orden jerárquico mundial, ” él dijo.

“Por lo tanto, utilizo mi posición de privilegio para servir tanto como pueda donde y cuando sea necesario”.

Djokovic también expresó su gratitud hacia los organizadores TA, el gobierno australiano y los ciudadanos por permitir que los jugadores compitan en medio de la pandemia.

“Las cosas en los medios se intensificaron y hubo una impresión generalizada de que los jugadores (incluido yo mismo) somos ingratos, débiles y egoístas por sus sentimientos desagradables en cuarentena”, agregó.

“Lamento mucho que haya llegado a eso porque sé lo agradecidos que están muchos. Todos vinimos a Australia para competir. No poder entrenar y prepararse antes de que comience el torneo no es realmente fácil.

“Ninguno de nosotros cuestionó los 14 días de cuarentena a pesar de lo que dicen los medios de comunicación”.

Por REUTERS.