Tras la culminación del período constitucional del Gobierno del Estado de Aguascalientes a escasos días, surgen las reflexiones de los alcances y retrocesos que se presentan en la actual administración gubernamental saliente a cargo del Ing. José Carlos Lozano De la Torre, a lo que, de manera presencial se distinguen remedos de obras gubernamentales que se hicieron en otros períodos, surgiendo así, la incógnitas de ¿eran necesarias y urgentes estas obras? ¿Se querrá igualar y creer dejar huella en el ánimo ciudadano con estas decisiones?, pero la opinión de algunos ciudadanos orgullosos de la antigua Tierra de la Gente Buena, simplemente afirman entre tantas cosas, que actualmente, se gastan sumas millonarias en obras que no tienen el aval de la ciudadanía, es decir, se hicieron a ultranza y a capricho de los intereses vanidosos individuales de este Gobierno, beneficiando con ello, a su círculo tan cerrado de aduladores capitalistas.
Sin más razón de resaltar algunas de estas acciones gubernamentales, El Látigo acudió a levantar evidencias de este reportaje ocupándonos en recordar aquella obra visionaria, bien planeada y ejecutada en el sexenio del ex Gobernador Profe. Enrique Olivares Santana q.e.p.d., la correspondiente a la Avenida Adolfo López Mateos, jamás se le ha hecho una reparación, pero hoy día sí se tomaron la “molestia” de abrir esta calle para ejecutar una faraónica obra, que hace las veces de replicar el diseño de los pasos a desnivel como el realizado por el que fuera Gobernador, el Ing. Miguel Ángel Barberena Vega q.e.p.d. en esta céntrica zona de la Avenida, agregamos también la observación de lo sucedido en el mandato Constitucional del Lic. Otto Granados Roldán, que implementará uno de los distintivos turísticos tradicionales de la Feria de San Marcos que sin lugar a dudas, era el monumento de El Encierro, alusivo a los toros, ahora desmontado, y bueno ya que andamos en temas del perímetro ferial, no hay que olvidar que este se hace extensivo dando un toque modernista en el quehacer gubernamental del envidiado, repudiado y quién le ayudara a arribar al Poder a Lozano, claro el que le cede la estafeta, o sea, el afamado “Rorro”, llámese Ing. Luis Armando Reynoso Femat siendo autor de la construcción de la tan visitada Isla San Marcos, sitio donde en este sexenio se Construyó el Centro de Convenciones.
Esto solo es una referencia histórica para destacar el distintivo de remedo del Gobierno de Aguascalientes de como se condujo esta administración, pues habiendo un Teatro Alameda y teniendo el Centro de Convenciones aún así, se invirtió en aquel sector de la Alameda, pero como dice Juan Pueblo “Siempre hay un prietito en el arroz”, así ahora este gobernante que es hechura política del Profe. J. Refugio Esparza Reyes q.e.p.d. mismo que en sus citas decía “¿Qué ecos se escuchan?”, pues es preciso recordarle donde se encuentre ilustre ex Gobernador, que el eco de su honradez, sencillez, humildad, visión y calidad humana no se repitió en los tiempos actuales, pero sin embargo, lo que si se repitió fue la idea de extender el edificio del Poder Judicial en la entidad, obra original de aquel sexenio, así pues, ante la experiencia de opinión ciudadana principalmente de Pensionados que confluyen en la Plaza Principal, se lamentan mucho de no tener ese Aguascalientes digno y ejemplar que existió pero que por los intereses voraces hoy día, se perdió por completo, es más, este escenario donde asiste la mayor parte de la población es la Plaza de Armas, es un lugar que se remodeló originalmente por el fallecido ex Gobernador Rodolfo Landeros Gallegos q.e.p.d., mismo que dejó visos de modernidad y funcionalidad, pero ahora solo deja mucho que desear pues sin requerirse una manita de gato como popularmente se dice, ni existiendo una cifra estadística de los accidentes que provocaba ese piso siendo este uno de los argumentos fabricados, se levantó ese mármol costosísimo patrimonio de Aguascalientes, que por cierto, hasta el día de hoy no se sabe donde fue a parar, aunque sí se rumora a donde, y como consuelo de tontos, también no han aparecido esos bellos leones, que hubieran en esta Plaza, habiendo voces de mirar unos igualitos en un Rancho de propiedad privada, ¿qué casualidad verdad? ni hablar, se ha visto de todo, como accidentados en esta nueva obra millonaria de la Plaza de Armas, en la que El Látigo ha sido testimonio de ello, pero se ha resuelto no habiendo consecuencias graves, lo que si tiene consecuencias es el daño financiero a las arcas gubernamentales, es más que visto, por tanto, es importante recordar que la Ciudadanía no olvida ni muestra avalar este tipo de actos y menos cuando están lacerados sus intereses familiares en temas económicos, de bienestar social y de salud.
Por Osharu
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