Ejidatarios de San Felipe de los Alzati, en el municipio de Zitácuaro, Michoacán, denunciaron que fueron amenazados y golpeados por integrantes del crimen organizado, quienes pretenden acabar con los bosques de esa comunidad indígena.
Integrantes del Consejo de Vigilancia señalaron que un día después de la última agresión denunciaron los hechos ante la Fiscalía Regional, toda vez que lograron identificar al agresor.
Agregaron que viven con miedo debido a las amenazas recibidas por cuidar los bosques, toda vez que quieren talarlo.
Nosotros vivimos con miedo, porque nos amenazan a causa de que cuidamos los bosques. Lo quieren talar”, indicaron.
Lo anterior coincide con un reporte de la Policía de Investigación y de Michoacán, que levantaron en días recientes un peritaje pre-tala a un predio ubicado en el cerro del Hortelano.
El Consejo de Vigilancia explicó que el jueves cortaron arbolado adulto de tres hectáreas, pero que la Policía Municipal no patrulla esa comunidad, pese a que es un poblado en el que se han registrado varios hechos violentos.
El miércoles pasado, fuentes de la Fiscalía General de Michoacán confirmaron que dos personas fueron ingresadas lesionadas por arma de fuego en un hospital, mientras que dos vehículos baleados habían sido localizados sobre la carretera.
Hasta el momento, Toribio Sánchez Martínez, director de Seguridad Pública, no ha dado declaraciones al respecto.
El mando policial se incorporó recientemente a la Comisaría en medio de críticas, luego de que en febrero pasado fue difundida en redes sociales una agresión en contra de indígenas de la comunidad del Aguacate.
La Comisión Estatal de Derechos Humanos (CEDH) afirmó que, mediante la respectiva Visitaduría Regional, se emprendió una investigación de oficio por los posibles abusos.
Con información de Quadratín
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