Por Osharu.
Atinadamente podemos afirmar que las instancias laborales en Aguascalientes están fuera de lugar y vaya que nos referimos hasta en su condición de lo físico, como el caso de la Junta Local de Conciliación y Arbitraje, que ahora relampagueantemente desde hace unos días se mudó a otra Plaza Comercial ubicada a escasos metros de donde se localizaba, pero ahora por la Avenida Adolfo López Mateos oriente, enseguida del Parque Miguel Hidalgo teniendo una circulación de oriente a poniente, bueno bueno bueno, para que tanta descripción, si a final de cuentas se desplazarán los afectados para esa dependencia gubernamental adscrita a la SEGGOB, digo, porque en la experiencia periodística se acudió a tal sitio, con miras a anunciar ese cambio de domicilio, pero ¿qué creen? además de sólo poner un módulo para disque asesorarte y atenderte, cosa que no ocurrió, tal y como se demuestra en las fotografías tomadas por el que esto escribe, ocasión que nos permitimos arribar hasta la entrada principal, tras librar escuela de idiomas, cafetería y otros comercios instalados en dicho lugar, en donde nos topamos con una soberbia actitud de un “aparente” funcionario público que con sobrada autoridad, sencillamente negó el derecho a sacar fotografías, aclarando, era otro el fin inicial para informar del cambio de oficinas, pero ya ven, a pesar de ser edificios públicos, con atenciones públicas y que son instancias gubernamentales, tal parece que tendrá que sacarse hasta pasaporte y visa para ejercer las labores propias del periodismo ¿no creen?.
En ese sentido y en razón de comentarios de algunos desorientados trabajadores despedidos, compartidos para ELA, sentenciaron “aquí el protegido siempre es el patrón, nos hagan lo que nos hagan, se salen con la suya, dándonos lo que se les antoja o acuerdan normalmente, estando en desventaja por completo, pues no se entiende como el gobierno los deja instalar a unas empresas y después es claro que no los perjudicarán” ni hablar, en definitiva, sí que se salen de lugar algunas determinaciones, como el de prohibir el paso, sentenciar a la ligera en detrimento de la clase trabajadora, pues a pesar de presentarse serios abusos, cuando bien les vaya, los liquidan con míseras cantidades y tan tan, no se diga, a los tantos y tantos promotores de marcas comerciales en tiendas departamentales y/o Centros Comerciales, mediante el esquema de los Out sourcing fundamentalmente.
Como bien dicen algunos Abogados luego entonces, “no se puede chiflar y comer pinole” o la otra “no se puede ser juez y parte” o sea, mientras que con bombos y platillos se presume la atracción de inversiones y la instalación de empresas que otorgan algunos espacios de empleo, es por tanto inconcebible, o difícil de creer que les aprieten el cuello para que actúen en el marco de la ley, más aún; si existiere lo que tradicionalmente se estila desde tiempos atrás, pero que se acuñaron, los mentados “moches” los cuales, conceden privilegios y autorizaciones gubernamentales correspondientes, situación que complicaría la posibilidad de sancionarles ¿o no?.
Como quiera que sea, finalmente es preciso entenderlo, el personal de esa Junta, sus salarios son erogados del presupuesto estatal, llámese recursos públicos, motivo para que en consecuencia deberían tenerlo presente en su actuar, para no dejar la mala imagen y la contradicción de la esencia del quehacer público, por consiguiente.
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