Por Oscar H. Manzano Cisneros.
“Conócete, acéptate, supérate”
San Agustín.
Las 4 P´s del Éxito
- Paciencia
- Persistencia
- Pasión
- Perseverancia
Contemplando nuevamente, la reflexión que nos conceden estas sencillas reflexiones, pero más aún, observando el testimonio de vida del ilustre y servicial personaje, actual guardia de seguridad en la Alberca Olímpica de Aguascalientes, José Campos Contreras, quien, en su compartimiento, da cuenta, de lo significa, conocernos, aceptarnos y superarnos, coincidentemente con lo que, nos lo afirmara San Agustín en su oportunidad, en afán de sembrar un aliento y esperanza en el curso de nuestro destino.
Reconociéndose como sincero, sencillo, servicial, comprometido y trabajador, “Don Campos” como regularmente se le llama, nos mencionó parte de su biografía, a manera de ser un referente de lucha y esperanza, toda vez que, si observamos con detenimiento su devenir por la vida, sobrepasó en el anterior Distrito Federal, nada menos, que el terremoto de 1985, sobreviviendo, luego de que trabajaba dignamente, en el servicio público de transporte como vulcanizador, donde, lamentablemente, a la postre del tiempo ante los cambios políticos, lo despidieron y obligaron así, a regresar a su tierra natal de Aguascalientes.
Agregó también, ser hijo de un Padre Ferrocarrilero de nombre Pedro Campos y su señora madre, Catalina Contreras, a los cuales, les aprendió una educación con cimientos de valores, muy a pesar, de haber quedado huérfano de Padre, cuando apenas tenía un año de vida, cursó hasta el sexto de primaria en la Colonia del Trabajo, hermano de 10, ex esposo de María de los Ángeles Oropeza y papá de Analí, Luis David y José Alexis Campos Oropeza alías “El Banderas” porque nace un 24 de febrero, consideró, “es la familia un motor de crecimiento, a pesar de ya no estar junto a su Señora, se lleva bien con ella, apoyando en la formación de sus hijos” manifestó.
Dentro de su amena charla, expuso, la amarga experiencia de irse de mojado a los Estados Unidos, donde, se lesionó y sin embargo, “gracias a la protección de Dios, salió a pesar de su difícil situación, incluso, librando la migra, lo que le permitió pasar por San Julián, Santana California, Anaheim y llegó hasta Seatle donde trabajó normal” pero fue sin lugar a dudas, una experiencia, que marcó su vida, indiscutiblemente.
Ante la serie de lecciones de vida, expuestas, nos conminó, a ser enamorado de tu trabajo, no rendirte y tener fé, para salir adelante, como ha sido su ejemplo, es más, a sus 62 años años, es importante resaltar su aparente impedimento para caminar, luego de que, la bicicleta es y ha sido, no sólo, una herramienta de trabajo que le da la oportunidad de desplazarse, sino, sus propias piernas, y todo un reto implícito para seguir adelante, cumpliendo a cabalidad con su responsabilidad, coincidiendo entonces, con aquellos mensajes de la bella Gobernadora Tere Jiménez, quien, a menudo reitera, luchar por los sueños y alcanzarlos con trabajo, recordó.
Las enseñanzas están a flor de piel, “ante los padecimientos de hernias discales, buscó fortaleza en el cristianismo y supo verdaderamente de la fe y la esperanza bondadosa de dios”, por tanto, exhortó a los demás, luego de que, dijo “para mí, es una enseñanza, no una religión, aprendiendo de la vida de cristo, ya que tu padre es Jehová” explicó, gustoso y entusiasmado.
Reconociendo muy presente la complicada forma de vida de Cristo, aprovechó para mandarle a los jóvenes un mensaje o consejo como lo quieran ver, sobretodo a aquellos que se pierden en los vicios como la drogadicción, razonó diciendo “hay que tener fe, conocer a Dios, conociendo a Dios, es mucho y él te enseña la sabiduría y la grandeza, para no pensar en eso ni en el suicidio, a mí me ayudó en mi lesión y lo comparto con agradecimiento” resumió.
En ese sentido, añadió, “te dan ganas de vivir, y de aprender de las lecciones que las mismas lesiones te dejan, pero eso, no significa que avientes la toalla, al contrario, sigan adelante con sus sueños” reiteró.
Como resultado de esa acción de vida espiritual, manifestó, “estar vivo es la mayor satisfacción en mi vida, para así, tener familia, conocidos, vecinos, compañeros y disfrutar esa oportunidad, que se nos vuelve a conceder” nos insistió, dentro de su plática, siempre tratando de abonar en este espacio, como referente más, que busca que Tracemos Jubilosos Ejemplos, más allá de nuestro Estado, mismos que, se desea, puedan ser conocidos y analizados, en miras a lograr una concientización, sensibilización y desde luego, evitar desistir y provocar alguna lamentable tragedia, como últimamente ocurre, y que no debe de ser, “hay luz en sus caminos, búsquenla, encuéntrenla y todo cambiará”, nos exhortó Campos.
Casualmente, como servidor público aunque aclaró, no ser burócrata, pero se ha desempeñado a lo largo de 12 años en instituciones públicas, como las instalaciones del IDEA, como elemento de seguridad privada, se ocupa, “servir y atender con respeto a tod@s en todo momento, eso, es parte de las grandes enseñanzas de su madre” lo determinó, mediante su sencillez que le caracteriza.
En síntesis, recopiló algunos de sus razonamientos y los dejó plasmados, en la búsqueda, de que se aprenda de la experiencia de los viejos, pues como dice el dicho “Más sabe el diablo por viejo…que por diablo” en ello, deja sus anécdotas, recuerdos, testimonios, vivencias y lo más sustancial, aprendizajes para no rendirse ni ser del montón, mucho menos, de la mediocridad, que a nada nos lleva, “me he levantado a pesar de las caídas, dejé atrás silla de ruedas, cirugías y médicos, veme aquí, al pie del cañón, sirviendo con gusto”, y como conclusión, se describió modestamente como un hombre “sencillo, consciente, paciente, atento, servicial”, aprovechando este espacio, nos explicó, “ser el beisbol, uno de su hobbies y pasiones predilectos desde su juventud, pues hasta lo practicó en el Kerry Salas, Enrique Estrada, Eduardo Mesa y en Ferrocarrilero”, despidiéndose con la razón “lleve una educación de unos padres sencillos, quienes trataron de dar lo mejor, a pesar de ser huérfano, me hizo falta quien me jalara las orejas, pero eso, lo cumplió mi madre y me sirvió toda la vida, cuenta mucho lo que nos brindan los papás y a ellos, los entendemos hasta que somos padres, pèro es mejor, tenerlo presente siempre” y alcanzar la felicidad en santa paz, con cosas buenas, que tanto nos distinguen a lo largo de los años.
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