Por Osharu.
Dando seguimiento puntual al desarrollo de la exigencia de justicia en materia de la destitución del titular secretario del Sindicato Único de Trabajadores del Estado y los Municipios de Aguascalientes, Fede Rico Domínguez, es importante resaltar el hecho en el que, se presentó en la entidad, el “padrino” sindical de éste personaje, Francisco Javier Isáis Mayoral, el cual, a tambor batiente y ante el desconcierto de funcionarios estatales como Jesús Santana y Arturo González, o de los que lo apoyaron como la Alcaldesa del MuniAgs, pues amenazó a aquellos que buscan destituir al dirigente sindical del SUTEMA, acusándolos de intromisores y faltos de respeto a la autonomía sindicalista, arengando, la promesa de que acudirán los representantes de toda la República Mexicana para respaldarlo en todo, a su pupilo, con miras a evitar esa osadía de quitarle esa representatividad, que por cierto, está en tela de juicio, desde la óptica jurista.
Hablando de legalidades, es importante rescatar entonces, el precepto ofrecido por el Presidente Electo de México Andrés Manuel López Obrador, correspondiente a “nadie por encima de la ley” así ahora, en esa tesitura se tendrá que resolver con puntualidad el esclarecimiento del caso en cuestión, es más, tal parece que se busca la protección de x, y o z personas, para permanecer en el cargo, no dudando ni tantito, que hasta Morenista se haya convertido ya para lograr su cometido, situación que es de todos sabido, que si algo le ha caracterizado a Domínguez, es ese perfil de traición, si no, pregúntenle a LARF, China Aguilera, CLT, LMR, TJE, AGE por mencionar las abreviaturas a los cuales, alevosamente utilizó, en afán de sostenerse en la titularidad de la organización “representante” de los burócratas durante los últimos años, a pesar de no ser ni funcionario público, digo, eso demuestra la información solicitada en Transparencia y que es corroborada por sus detractores.
En definitiva, es necesario hacer un comparativo del caso Colima, asunto conocido de manera pública, en el que, se le acusó a éste sindicalista Isáis, “el haber recibido, de manera ilegal, más de 330 mil pesos, cuando era dirigente del Sindicato de la Ciapacov, en 1997, fue destituido de la dirigencia de burócratas del Ayuntamiento de Colima; Congreso sancionó los empréstitos indebidos; pretende crear otro sindicato, así lo comprueban documentos en poder de Diario de Colima, mismos que registran la investigación realizada en 1999 por la Contaduría Mayor de Hacienda al ejercicio financiero de 1997, en el organismo operador de agua” digo, pues si se toma en cuenta estos antecedentes, quizá sea una réplica ahora en Aguascalientes, motivo por demás lastimoso, ya que como dice el dicho popular “nadie es profeta en su tierra” se busca extender esa rapiña de los charros en los sindicatos, a diferencia que las leyes son distintas en cada entidad, o incluso, no se cuentan con los mismos elementos de juicios, pero invariablemente de, el cumplimiento de la ley, es y debe ser, la prioridad del ejercicio del Estado de Derecho, por tanto, como dice Don Teofilito “zapatero a tus zapatos”, dejen que se esclarezca lo señalado, al fin que eso, no es una cacería de brujas, si no, un ejemplo de hacer justicia verdaderamente en bien de los ofendidos y lastimados servidores públicos en el Estado, dejando la reflexión de lo ocurrido también en aquella entidad, publicada por el Diario de Colima, donde, se señaló, “en 1999, los trabajadores del Ayuntamiento de Colima votaron a favor de la destitución del Comité Directivo del gremio capitalino, donde Isáis Mayoral se desempeñaba como secretario de Organización, detrás de la conformación de un nuevo sindicato, existen intereses oscuros y políticos, afirmó el dirigente de los trabajadores del Ayuntamiento de Colima, Héctor Arturo León Alam, mencionando que lo que se pretendió era desestabilizar al gremio, y negar las acusaciones lanzadas en su contra, en el sentido de que no atiende las peticiones de los trabajadores y que se hace préstamos por 500 mil pesos, recordó que Francisco Javier Isais es un señor con objetivos nada claros para los burócratas, que viene después de 20 años de estar fuera de Colima”, ni hablar, la suerte está echada, con características al rojo vivo, ocasión que enciende el paredón del castigo de las injusticias o impunidades, o de plano, el contubernio dócil y soez de las autoridades, incurriendo en una complicidad que les restregarán la clase trabajadora a la que le han fallado, aunque se afirme lo contrario.
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