Esfuerzos insuficientes los del MuniAgs.

Por Oscar Manzano.

Ante las promociones publicitarias en materia de “Bacheo” por parte de la autoridad municipal de Aguascalientes, se hace necesario retomar algunas inquietudes ciudadanas compartidas para El Látigo Digital, o bien, recorrer ciertos sectores de la ciudad denominada “El Corazón de México” para dar cuenta así, de lo insuficiente que representan los esfuerzos emprendidos por en el MuniAgs.

En ese sentido, basta transitar desde calles céntricas hasta fraccionamientos de la periferia, no se diga, en la parte oriente o de plano, quizá en las comunidades rurales, aunque a decir verdad de éstas últimas, tal y como se ha demostrado en repetidas ocasiones, adolecen de pavimentación; situación que demanda una atención oportuna, dejando la exigencia para que las acciones gubernamentales se visualicen en lugares que tanto añoran ese beneficio, sin mas ni mas, en lugar de caer en duplicidades con obras innecesarias o urgentes.

Realmente se visualizan grandes retos en ese rubro de las avenidas, toda vez que, aunado a los desperfectos de las unidades vehiculares, propiedad de los ciudadanos simplemente es lastimoso, incómodo irritable trasladarse por esos sitios , los cuales, sufren del abandono en su mantenimiento o de plano, son ignorados por completo.

A raíz de lo observado y exhibido, muy a menudo, se dispara la serie de interpretaciones sociales, entre ellas, resaltamos la correspondiente a la mala calidad de los materiales con los que, se construyeron o construyen hasta ahora esas calles, que hoy, particularmente queda demostrado, les urge atención inmediata.

Inevitablemente se genera entre la población la interrogante ¿qué criterio emplean los funcionarios públicos municipales, en especial los de la SOPMA, para resarcir las deficiencias de los pavimentos, o en su caso, la planificación para establecer el orden de las prioridades? Deseando que dicha respuesta, satisfaga indistintamente lo exigido y demandado con antelación, por aquellos ciudadanos, que visualizan estos escenarios que ni toman en cuenta siquiera.

Asumiendo las tantas deficiencias, cabría posiblemente la opción de la falta de presupuesto para satisfacer esos requerimientos, sin embargo, si calculamos las cifras de los informes gubernamentales que durante distintas administraciones han realizado, son pues, motivo suficiente para su debido análisis, causando la alarmante preocupación en tanto, de obras que sin gozar de un año de antigüedad siquiera, se convierten en foco de atención para la consabida solución de arreglo, aclarando, eso es y ha sido una constante que se hace presente en los diferentes gobiernos del municipio capital, a lo largo de los años.

Por último, subrayamos los términos genéricos y globales que justifican las obras, carentes de particularidades y sistemas de control, que permitan visualizar realmente lo que se ejecuta y la manera en la que se realizan, con el fin de ubicar incluso, el cobro y empleo de garantías, tras la aplicación deficiente en los pavimentos, aspecto por demás visible sin distingo.