El empresario argentino Carlos Ahumada llegó a México para cumplir su proceso de extradición, pero logró la libertad tras hacer valer una suspensión provisional.

Ahumada Kurtz llegó a la Ciudad de México cinco minutos antes de las 5:00 de la mañana proveniente de Argentina.

Fue recibido por la Fiscalía General de la República (FGR) y lo presentó a la fiscalía capitalina, quien únicamente le hizo una “invitación” para presentarse ante el juez que lleva su caso por fraude genérico.

La fiscalía reportó que el sentenciado se presentó ante el Juez de Ejecución Penal, en el Reclusorio Preventivo Varonil Norte. Se identificó con un pasaporte extranjero e hizo entrega de diversos documentos.

Durante la audiencia, el agente del Ministerio Público solicitó a la autoridad judicial meter a Ahumada al penal para terminar una sentencia por su responsabilidad en el delito de fraude genérico.

Según la fiscalía, Carlos Ahumada tienen pendientes 10 meses y 23 días de prisión, además del pago de 30 millones de pesos.

Sin embargo, la defensa legal del sentenciado afirma que esa pena ya prescribió:

El juez escuchó los argumentos y determinó dejar libre a Carlos Ahumada, ya que su defensa legal presentó una suspensión provisional vigente como parte de un juicio de amparo.

También se encuentra pendiente la solicitud de prescripción presentada por Ahumada; la fiscalía adelantó que combatirá esa solicitud y buscará que el empresario termine su condena en la cárcel.

La fiscalía dice que el sentenciado “no acudió voluntariamente ni fue conducido por agentes de la Policía de Investigación (PDI) a ninguna instalación de la FGJCDMX, como su defensa señaló”.