El pimiento es un fruto originario de América, específicamente de la región de Mesoamérica, y forma parte de la familia de las solanáceas, al igual que el tomate, la papa y la berenjena.

Conocido también como “pimiento morrón” o “pimiento dulce”, es un ingrediente ampliamente utilizado en la gastronomía mundial gracias a su versatilidad, su sabor suave y su riqueza en nutrientes.

Existen diversas variedades de pimientos, diferenciadas principalmente por su color: rojo, verde, amarillo y naranja. Los pimientos verdes son aquellos que aún no han madurado por completo, mientras que los rojos, naranjas y amarillos son versiones más maduras y dulces del mismo fruto.

Cada color tiene ligeras diferencias en sabor y contenido de nutrientes, pero en general, todos son excelentes fuentes de vitaminas y antioxidantes.

El pimiento posee gran cantidad de agua, hidratos de carbono, fibra, y minerales como potasio y magnesio. Es rico en betacarotenos, según datos de El Poder del Consumidor.

“Proporciona casi 28 kcal por cada 100 gramos (g) de alimento, por lo cual tiene un bajo contenido calórico. Es el alimento más rico en ácido ascórbico, aportando el triple de vitamina C que las naranjas. Esto ayuda en la cicatrización, fortalece el sistema inmunológico y facilita la absorción del hierro de los alimentos, contribuyendo a evitar la anemia”, explicó.

Además, sostuvo que la fibra evita el estreñimiento y contribuye a controlar el colesterol y el azúcar en sangre. Además, genera sensación de saciedad y, por lo tanto, reduce la cantidad de alimentos ingeridos.

“En México es utilizado como especia o condimento, posee alto valor nutritivo y bajo contenido en grasas, así como gran cantidad de agua, rico en vitaminas, minerales, carbohidratos y fibra”, sostuvo por su parte el Gobierno de México.