Dormitaba allá en el parque,
la calaca en agonía,
se le hacía un poco tarde
pa´ llevarla con su tía.
Recorriendo por las calles,
la Catrina se veía,
entre luces y apagones
a Leonardo sonreía.
Llegaban a los panteones,
fuertes lluvias y los vientos,
esos, sí, eran tormentos,
al no encontrar las razones.
Entre risas y carcajadas,
las calaveras andaban,
recogiendo la basura
ya, la fiesta la empezaban,
recógela mi criatura
ó tendrás unas mentadas.
En todas las delegaciones
a Leonardo lo encontraban,
tapando toditos los baches,
pues a MIAA, se le olvidaban.
¡!Ánimas del purgatorio!!
traigánse al servicio comunitario,
y registren en el diario,
a Fernando el Diputado.
Caminando allá en el centro,
el programa existía,
y apuntado pa´l festejo,
el Catrín ya se venía,
gritaba desde adentro,
¡Viva Aguascalientes!
esta, sí, la Ciudad de Tu Vida.
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