Las campañas de Ricardo Anaya y José Antonio Meade repartieron culpas a los gobiernos de Enrique Peña Nieto y Felipe Calderón (emanados del PRI y del PAN, respectivamente), por el aumento de la violencia en el país, mientras la campaña de Andrés Manuel López Obrador señaló que debido a que no se modificó la estrategia de seguridad pública, ha habido “pura guerra y sangre” en el país desde hace más de una década.
Al retomar el caso de los estudiantes de cine asesinados en Jalisco por una supuesta confusión, en el #DebateEnAristegui, Damián Zepeda, representante de la campaña de Anaya, indicó que es un “caso por demás trágico y muy lamentable” que demuestra que la violencia “está fuera de control, no es una exageración decir que estamos peor que nunca”,por lo que su candidato propone una nueva estrategia en la que hay “muchísimo más inteligencia que balas”.
Mariana Benítez Tiburcio, representante de la campaña de Meade, dijo que esos asesinatos muestran el “grado de perversidad” de los criminales, con “acciones carentes de cualquier tipo de humanidad” y reconoció que “cada vez la violencia se recrudece más”.“Eso habla de una situación muy compleja que enfrentamos como país; es muy fácil en culpar, encontrar un responsable y siempre contra una persona, el presidente de la República… tenemos que voltear a ver qué es lo que está pasando en los estados, cuando dicen que es culpa de este gobierno, hay que ser más cautos, reflexivos, 1 de cada 10 delitos se cometen en lo local”, expuso.
Martí Batres, representante de la campaña de AMLO, recordó que “se apostó a una guerra, a medidas de fuerza pero no se tuvieron los resultados deseados”, por lo que “necesitamos además… oportunidades para los jóvenes, educación para los jóvenes… si no hay crecimiento económico, la violencia va a seguir”.
Zepeda le reviró a Tiburcio: “cuando alguien gobierna o aspira a gobernar tiene que hacerse cargo, es delito federal el combate al crimen organizado”. A lo que Tiburcio le contestó que los estados tienen facultades para investigar delitos y hoy el diario Reforma publica cómo han aumentado los homicidios en las entidades que gobierna el PAN, “los gobiernos de Acción Nacional han sido un desastre“; no obstante pidió no repartir culpas pues el tema “es mucho más profundo, los estados también están fallando; las fiscalías no están haciendo su trabajo”.
El panista añadió que “cuando gobierne Anaya se va a hacer cargo de lo que le toca… el crimen organizado es federal y nos vamos a hacer cargo con este cambio de estratega”.
Batres mencionó la “responsabilidad del gobierno de Calderón y de Peña” en la espiral de violencia que vive el país; “pura guerra, pura sangre, nada de crecimiento y nada de apoyo a los jóvenes. Es una olla exprés que estalla de manera continua”. Recordó cómo en su momento Anaya consideró que la estrategia de Calderón fracasó, aunque previamente había dicho que había sido un gran gobierno.
Damián Zepeda aclaró que en el sexenio pasado hubo “buen manejo económico, establidad del tipo de cambio, fue correcto que combatiera el crimen, lo que hoy decimos es evidente que la estrategia falló”, “le faltó inteligencia como le faltó también al de Peña”.
La representante priista lamentó que no se haya podido generar un compromiso nacional y “nos hemos quedado cortos en la prevención”.
“No podemos hacer corte de 2012 a la fecha porque esta estrategia viene desde antes. En el sexenio de Calderón hubo estrategia fallida, no cambió (con Peña), solo se difundió menos (las noticias sobre violencia)… la responsabilidad del gobierno federal es central. Quien ha tenido resultados buenos en materia de seguridad es AMLO”, refirió el representante de Morena.
Sin embargo, los representantes de Meade y Anaya refutaron esas cifras y recordaron la marcha contra la inseguridad en la administración de López Obrador. También ambos pidieron aclarar la amnistía pues consideraron podría tratarse de un “guiño” al crimen organizado, lo que Batres rechazó: “No se ha propuesto ningún pacto con el narco”.
Además, debatieron sobre la fiscalía autónoma que impulsa el PAN, mientras Morena lo consideró una “farsa”. De hecho Benítez Tiburcio le pidió a Zepeda aclarar si no pretenden convertir en fiscal al ex jefe de Gobierno, Miguel Ángel Mancera.
Habrá “fiscal sin liga partidista“, prometió el representate de Anaya. “Avísenle a Mancera“, pidió Mariana.
“Si el fiscal es autónomo que lo sea de verdad”, agregó el de Morena. Y es que “cuando nombran a magistrados, nombran a gente de órganos autónomos, y se ponen de acuerdo el PRI y el PAN…es una farsa, no engañen, hablan de autonomías cuando no hay ninguna autonomía”.
En la mesa también surgió el tema de las organizaciones de la sociedad civil, que según el PAN y el PRI son desdeñadas por AMLO.
“Hay grupos que se dicen sociedad civil pero representan intereses políticos y económicos… lo que representa Claudio X. González no es sociedad civil”, aseveró Batres.
Además, se abordó el tema de los departamentos que Meade acusó son de López Obrador y no los reportó, a lo que él contestó en el debate que si eran de él, se los regalaba.
“Lo que está en el registro público es lo que es… para la ley quien aparece como propietario es AMLO”, dijo Mariana Benítez y criticó la “falta de palabra” del candidato.
“Esos departamentos nunca fueron de AMLO, eran de su cónyuge, se los dejó a sus hijos, lo que vale es la escritura y una sentencia judicial”, respondió Martí.
Por último, Zepeda aseguró que Anaya ganó el debate del domingo y “el PRI se va a ir”, por lo que llamó a que “nos sumemos con el único que puede ganarle a AMLO”, “lo vamos a alcanzar y rebasar”.
“El PAN no representa ningún cambio, el PAN es PRI”, finalizó Batres.
Información AN
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