Atendiendo a la diversa demanda ciudadana sobre el incremento de robos a transeúntes y comercios en el centro de la ciudad de Aguascalientes, El Látigo se dio a la tarea de investigar sobre este asunto teniendo evidencias compartidas de algunos comerciantes que ahí están establecidos, teniendo muy presente que la labor de los ciclo policías municipales se ha destacado por su pronta y eficiente respuesta, más sin embargo, no ha sido suficiente esta intención, pues según comentarios de un comerciante que lleva 42 años trabajando en esta zona, omitimos sus generales a solicitud expresa del mismo que teme a las represalias.
En este diálogo que se sostuvo con El Látigo, se dedujeron en honor ala verdad, varios aspectos que aquejan la seguridad en Aguascalientes manifestando al respecto, que en cuestión operativa se puede acreditar el cumplimiento de persecución y detención de los delincuentes que ponen a disposición ante la Ministerial por parte de la Policía Municipal, a lo que, de manera por demás incierta y enigmática se hacen los cuestionamientos de ¿Por qué si detienen a un joven por la mañana, por la tarde ya anda afuera otra vez en las andadas?, ejemplos de estos son muchos que cotidianamente se presentan.
A lo anterior, también se concluye que en estas fechas se avecina una asistencia de mayor número de personas que acuden al centro a realzar sus compras, de ahí la preocupación de este problema, aunado a que, en esta festividad de muertos, se disminuyó el número de elementos que se dedican a la vigilancia en el centro del municipio capital pues los distribuyen allá en esa área, situación que desfallece la seguridad en este sector céntrico, pero ante estas aseveraciones, solicitamos un punto de vista mayúsculo sobre la eficiencia también en el municipio capital en esta instancia de Seguridad Pública, resaltando el estado inoperante en el que se encuentran un gran número de patrullas, motivo que da pie a la restricción de patrullaje y vigilancia, aunque algunas de las que si andan en activo operativamente hablando, están a costa de que los propios elementos solventan los costos de las fallas mecánicas que presentaran.
El ejercicio de sus labores están perfectamente establecidos en el marco legislativo, así como las obligaciones y derechos a los que deben ajustarse, reflexión que aplicaría también a los entes administrativos que arrastran con estos pendientes que se traducen en incremento de inseguridad de la población, al no tener las herramientas de trabajo indispensables y en condiciones óptimas, por tanto surge la pregunta ¿no será mejor sacrificar algunas obras ostentosas y cumplir en estas deficiencias?, respuesta que debe darla los responsables que toman decisiones en el Ayuntamiento.
Como parte final de los comentarios citan a los diputados que no cumplen con la sociedad y hacen leyes que protegen solo a los delincuentes, pero de una u otra forma no nos cumplen al 100, ojalá los que siguen si cumplan verdaderamente si dicen que la ciudadanía es la que manda.
Por Osharu
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