Por Osharu.
Asumiendo la inquietud ante los señalamientos que se dan por parte de la ciudadanía, respecto a los desmanes causados; como consecuencia de las ignorancias, falta de planeación y supervisión en el quehacer gubernamental, correspondiente al MuniAgs, es pues, motivo de reflexión, dado que, sin lugar a dudas, se convierten en foco de preocupación, sencillamente dicho, en virtud de lo que representa.
Describiendo lo exhibido mediante las fotografías publicadas, se visualiza entre tanto, aspectos deplorables en estética urbana, despilfarro de recursos públicos, parcialidad en el criterio del cumplimiento a la ley, tal y como se ha anunciado en repetidas ocasiones.
Reconociendo esas experiencias observadas, damos pauta a manifestar la irritabilidad que generan entre la población, o sea, en síntesis, aseguramos, mientras no se tengan resueltos esos pendientes, sencillamente dan mucho que opinar como es el caso, pues, por un lado, a pesar de tenerse prohibido el ascenso de vehículos a la Plaza, eso normalmente no importa para la autoridad municipal, toda vez que, se dan esas vivencias, representando así, grandes riesgos al peatón, tras la subida de múltiples autos tipo sedan, camionetas, camiones, motocicletas, bicicletas, lo cual, en especial es solapado en la mayoría de los casos, por elementos de tránsito y/o policiacos; o bien, el otro escenario que genera la ruptura del recientemente re encarpetamiento en calles de la ciudad, no se diga, las ubicadas en el centro, donde hasta se simularon ciclo vías, por citar ejemplos, lo sucedido en Juan de Montoro y Francisco García Hornedo, ni hablar, al fin que el empleo duplicado de recursos públicos, además de notorio, es ofensivo y propicio para dilucidar la separación en las responsabilidades, hablando de la empresa concesionaria para la prestación del servicio del agua “potable” y el municipio capital en si, pues tal parece, que el único que le mete y ha metido desde tiempo atrás, es éste último, sin contemplaciones.
Añadiendo la localización de artículos en la vía pública, como la tapa de alcantarillado en lugares inadecuados, o en su defecto, los caídos bolardos decorativos en las avenidas, son muestra del absoluto desinterés que se tiene, partiendo en ello, con la deducción ¿si eso es tan frecuente y tan simple, que se espera de otras necesidades? en fin, son evidencias puntuales y certeras, que exponen realmente lo que significan para aquellas áreas responsables en la materia, pertenecientes al gabinete municipal, dicho sea de paso SEDUM, SOPMA, SSP, por mencionar algunas.
Sin lugar a dudas, son escenas ejemplares para descubrir la serie de olvidos, desinterés y deficiencias, reiterando, que dan cuenta, en afán de evaluar el mal actuar del gobierno en turno, causando, no solamente malestar, si no, críticas severas que enuncian el lado negro gubernamental, muy distante de lo confirmado recurrentemente, de forma oficial.
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