Con un discurso social-liberal pro europeo, Emmanuel Macron se convirtió en el próximo mandatario de Francia. Con tan sólo 39 años fue ministro del gobierno de François Hollande y ahora en el más joven político en ocupar el puesto de presidente.
Aunque sus ideales e iniciativas lograron captar la atención tanto de los franceses como de la comunidad internacional, hubo otro factor que hizo que acaparara los reflectores: fue el único de los candidatos a la presidencia en presentarse a todos los eventos junto a su esposa.
El líder del partido En Marche!, no sólo se dejó ver como a un candidato más; él le ofreció al país una pareja presidencial junto a Brigitte Trogneux, a la que el diario El País, describe como “el ‘ticket’ electoral del presidente”. Lo que llamó la atención de esta peculiar pareja no fue sólo el apoyo incondicional sino el hecho de que la esposa del ahora presidente, sea 24 años mayor que su marido.
Pese a que la prensa se centró durante la primera y segunda vuelta a las elecciones presidenciales, en la diferencia de edad, Macron le dio poca importancia y en ocasiones aprovechó para resaltar el hecho de que “esta singularidad no se destacaría si la diferencia de edad fuese al revés”, como es el caso del presidente de Estados Unidos y su esposa Melania Trump.
Sin embargo la historia de los Macron, para muchos, raya en lo romántico pues se conocieron desde que él era un adolescente de 15 años, estudiaba en una escuela privada jesuita en Amiens y ella era su maestra de teatro, casada y con tres hijos.
Brigitte Trogneux llevaba una vida burguesa en la provinciana Amiens. Estaba casada, con tres hijos. Ella era profesora de francés en La Providence, la escuela local de los jesuitas, donde también dirigía el taller de teatro. Fue allí donde conoció al niño prodigio de La Pro, como llaman a la escuela, un tal Emmanuel Macron.
“Me abrumó la inteligencia de este chico”, dijo en una ocasión Brigitte pues según cuentan muchos allegados a la pareja, Macron fue brillante desde pequeño y aunque en ese momento ambos se sentían atraídos fue hasta 2007 cuando se casaron pues incluso los padres del presidente le pidieron que se alejara de su hijo al menos hasta los 18 años.
Pese a que se distanciaron un tiempo, Emmanuel Macron le dijo desde que tenía 17 años que se casaría con ella y así sucedió. Ahora los hijos de ella, que incluso son de su edad, estuvieron implicados en su campaña.
Laurence, la ex compañera de colegio de Emmanuel, se convirtió en una de las partidarias más prominentes de su padrastro, apoyándolo, por ejemplo, en su último acto electoral en París y otra de las hijas de Brigitte, Tiphaine, de 32 años y abogada de profesión, también trabajó en su campaña.
En todo momento la familia se mostró muy unida e incluso, los siete nietos de Brigitte Trogneux le llaman “daddy” al próximo mandatario francés.
Otro de los puntos que hicieron más atractivo a Macron entre los votantes, fue su iniciativa por convertir en algo formal el papel de la primera dama, que hasta entonces en Francia no ha tenido relevancia. Él ha dicho que planea que su esposa, quien dejó su carrera como profesora para apoyarlo desde su paso en la administración de Hollande,ocupe un cargo en la administración. Incluso ha dicho que éste no sería remunerado.
(Con información de El País y BBC)
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